Hace unos meses leí Luz de febrero y me gustó mucho. Tanto, que me dejó con ganas de repetir con la autora y saber más sobre el personaje de Olive Kitteridge.
Por eso, una de mis lecturas de junio fue Olive Kitteridge, la novela con la que Elizabeth Strout ganó el Pulitzer en 2009 y que también está protagonizada por esa arisca mujer, a veces insoportable y otras veces entrañable, llamada Olive.
Olive kitteridge
Olive Kitteridge es una maestra retirada que vive en un pequeño lugar de Maine, en Nueva Inglaterra. A veces dura, otras paciente, a veces lúcida, otras abnegadamente ciega, Olive lamenta las transformaciones que han agitado el pequeño pueblo de Crosby y la deriva catastrófica que va tomando el mundo entero, pero no siempre se da cuenta de los cambios menos perceptibles que afectan a las personas más cercanas: la desesperación de un ex alumno que ha perdido las ganas de vivir; la soledad de su hijo, que se siente tiranizado por los irracionales caprichos maternos; y la presencia de su marido, Henry, que vive su fidelidad conyugal como una maldita bendición.
Mientras la gente del lugar va afrontando sus problemas, sean leves o graves, Olive va tomando conciencia de sí misma y de las personas que la rodean, muchas veces dolorosamente, pero siempre con una honestidad entrañable.
Aunque Olive Kitteridge es un libro que se publicó varios años antes que Luz de febrero, este último llegó antes a mis manos y, a pesar de que sabía que se trataba de una especie de continuación, decidí leerlo primero.
Por eso, durante la lectura no he podido evitar comparar estas dos novelas tan parecidas.
Igual que en Luz de febrero, en Olive Kitteridge nos encontramos con un libro dividido en varios capítulos, que son casi como relatos independientes en los que se cuentan historias cotidianas protagonizadas por los habitantes de un pueblo costero llamado Crosby. Y en los que, bien como protagonista o bien como personaje secundario, siempre está presente Olive, una mujer inteligente, directa, arisca, malhumorada y algo antipática.
Olive es una mujer de trato difícil a la que le cuesta mostrar sus sentimientos y que, a veces sin darse cuenta y a veces queriendo, es desagradable con las personas que la rodean. Como con su marido Henry (un hombre simpático, muy agradable y atento) y su hijo Christopher (un personaje del que no sé muy bien que pensar), que son quienes más sufren su carácter.
A través de las distintas historias que forman este libro -y que hablan con naturalidad y sencillez de temas como el amor, la fidelidad, la maternidad, la soledad, el matrimonio, la insatisfacción o la pérdida- vamos viendo como es Olive en esta etapa de su vida (anterior a la que se narra en Luz de febrero) y como es su relación con su familia y con algunos de los vecinos del pueblo, a los que también conoceremos, aunque más por encima.
Olive es una mujer que, a pesar de sus formas, tiene buen fondo. Pero en esta novela me ha resultado más difícil ver ese lado entrañable que tiene y que deja asomar en algunos momentos, ya que me ha parecido más arisca, desagradable y, a veces, hasta egoísta que la Olive más anciana que conocí en Luz de febrero. Por eso esta vez, más que aprecio, lo que he sentido por ella ha sido algo de pena en ciertos momentos.
Aunque esta novela también me ha gustado, me ha parecido algo más triste y, quizá por haberlas leído en orden inverso o por no haber dejado pasar más tiempo entre una lectura y otra, Olive Kitteridge no me ha dejado tan buen sabor de boca como Luz de febrero.
Aún así, me ha parecido una buena lectura. Fácil de leer, con personajes peculiares y unas historias interesantes que, en general, me han gustado bastante.
7'4/10
13 Comentarios
Gracias por tu reseña ^^
ResponderEliminarGracias a ti por comentar :)
Eliminar¡Hola! ^^^
ResponderEliminarMe alegra que lo hayas disfrutado, pero a mi no me llama este libro.
Besos!
¡Hola!
EliminarEn otra ocasión será. Un abrazo.
He oído hablar de esta autora, aunque todavía no he leído nada suyo, pero me alegra que te haya gustado.
ResponderEliminarUn abrazo, Lorena.
A mí la autora me ha gustado y seguramente repetiré con ella, aunque dejaré pasar más tiempo antes de leer otro de sus libros para que no se me haga repetitivo.
EliminarGracis por comentar.
Un abrazo.
Holaa!! suena bien aunque no es exactamente lo que estoy buscando en este momento, de todas maneras no lo descarto por completo. Gracias por la reseña.
ResponderEliminarBlessings!!
¡Hola!
EliminarQuizá más adelante. Gracias por pasarte a comentar.
Un saludo.
Leí hace poquito 'Luz de febrero' y me gustó mucho la historia y sobre todo cómo escribe Elizabeth Strout. Ahora estoy cargada de libros pero si tengo hueco leeré esta novela. Igual me pasa como a ti, que me gusta más 'Luz de febrero'. Ya te contaré si al final la leo.
ResponderEliminarUn besazo,
A mí también me gusta como escribe Strout y este libro es muy similar a 'Luz de febrero', lo que pasa que Olive se me ha hecho algo más antipática, más difícil de querer. Si te animas a leerlo me gustará saber tu opinión, estaré pendiente de tu blog.
EliminarUn abrazo.
¡Hola, Lorena! Es una pena que la impresión que te hayas llevado de la novela sea algo peor que la de Luz de febrero... A lo mejor es por haberlo leído más tarde y tener ya asumida la idea de la protagonista tal y como la retrata en el libro posterior. Aun así, los dos me resultan muy interesantes y me los apunto ❤️
ResponderEliminarGracias por la reseña y un abrazo
¡Hola!
EliminarSon libros muy, muy similares y los dos me han gustado bastante, pero 'Luz de febrero' lo disfruté más. Quizá porque al leerlos en orden inverso me ha pasado justo eso que comentas y me ha costado apreciadar a la Olive algo más joven.
Si te animas a leer alguno de ellos, o los dos, espero que los disfrutes.
Un abrazo.
¡Hola, Lorena!
ResponderEliminarLlevo apuntado "Luz de febrero" desde que leí tu reseña y la de Natalia de Yo leo novela. Pues tomando en cuenta lo que comentas, creo que voy a empezar por leer primero este libro, a ver qué tal me va.
Gracias por tu sincera opinión, aún no conozco la pluma de Elizabeth Strout ;)
Un abrazo.