LA SIRENA ROJA
Una investigación contra reloj para evitar nuevas víctimas del que podría ser un asesino en serie les conducirá a través de un entramado de prejuicios religiosos y oscuros secretos. El caso les absorberá hasta el punto de olvidarse incluso de sus propias vidas.
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Conocí a Noelia Lorenzo Pino con Blanco inmaculado y Purasangre, las dos primeras novelas de la serie policíaca protagonizada por Lur de las Heras y Maddi Blasco. Dos libros que estuvieron entre mis mejores lecturas del 2024 y me dejaron con muchas ganas de seguir leyendo a Noelia. Y como había visto buenas opiniones de la serie Chassereau y Macua pensé que, mientras espero a que llegue el próximo libro de Lur y Maddi, podía comenzar a leer esta serie anterior. Así que me fui a la biblioteca a por el primer libro: La sirena roja.
La agente Eider Chassereau y su compañero, el suboficial Jon Ander Macua, serán los encargados de investigar un caso de asesinato que comienza cuando el cadáver de un joven aparece con la espalda desollada. Unos días después, es encontrada una segunda víctima a la que también le han arrancado la piel, en este caso en la zona de los hombros. Dos víctimas cuya única relación parece ser que en la piel que les han arrancado ambos llevaban tatuajes hechos por la misma tatuadora.
La narración alterna el día a día de los protagonistas, en el que seguiremos la investigación pero también la vida personal de Jon Ander y, sobre todo, de Eider, con pequeños fragmentos narrados en primera persona por el asesino, en los que conoceremos momentos traumáticos de su infancia y podremos conocer un poco sus motivaciones para matar.
La sirena roja es un libro fácil de leer, con una historia entretenida y que en la parte final me tuvo pegada a sus páginas. Pero del que esperaba más.
Aunque quizá sea culpa mía, porque como las dos novelas que había leído de esta autora me gustaron mucho (al igual que sus protagonistas) tenía el listón y las expectativas bastante altas.
Pero es que esta vez la historia tardó bastante en engancharme y los protagonistas me resultaron algo indiferentes (sobe todo Jon Ander). Y eso que son personajes bastante reales y creíbles, pero aún así no terminé de sentir simpatía por ellos. Además, cada poco la autora nos recuerda el gran complejo que tiene Eider con el tamaño de sus pechos, lo que se me hizo muy repetitivo y pesado.
Aún así, como las novelas más recientes de Noelia Lorenzo Pino me han gustado bastante, voy a darle una segunda oportunidad a Chassereau y a Macua (a ver si consigo cogerles el punto) y voy a leer la siguiente novela de la serie. Ya que tengo la esperanza de que la cosa vaya mejorando.
6'5/10
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